INVESTIGACIÓN Y ESTRATEGIA DE DESARROLLO

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«Para apoyar la misión de Amgen de servir a los pacientes, nuestro objetivo en I+D es descubrir, desarrollar y suministrar medicamentos innovadores que aborden las principales causas de muerte y discapacidad. En un momento en el que muchas empresas se centran en enfermedades raras e indicaciones nicho, Amgen está trabajando para cubrir las necesidades de tantos pacientes como sea posible.

Para lograr este objetivo, debemos aprovechar plenamente las oportunidades que ofrecen el acelerado progreso científico y las nuevas tecnologías. La biotecnología y las ciencias de la información avanzan a una velocidad vertiginosa, abriendo nuevas e inmensas posibilidades. Al mismo tiempo, la competencia dentro de la industria se está intensificando y los obstáculos de acceso a los medicamentos son más numerosos y pronunciados.

Para mantenerse al día con estos retos y oportunidades cambiantes constantemente, Amgen ha adoptado una estrategia dinámica de investigación y desarrollo, diseñada para guiarnos en la toma de decisiones inteligentes e integradas que reflejan el mundo tal y como es hoy en día, al tiempo que nos posiciona para adaptarnos al entorno a medida que evoluciona. Al aprovechar las fortalezas de Amgen en la innovación científica y biotecnológica, estamos seguros de que podemos ofrecer soluciones que los pacientes y la sociedad aceptarán».


David M. Reese
Vicepresidente ejecutivo
Investigación y Desarrollo

David M. Reese
Vicepresidente ejecutivo
Investigación y Desarrollo

Amgen I+D se esfuerza por mejorar y prolongar la vida de los pacientes que sufren enfermedades graves. Con este propósito, hemos construido una empresa que se distingue por contar con científicos de primera línea y con un talento especial para aplicar enfoques novedosos al tratamiento de las enfermedades.

Asimismo, hemos concebido una estrategia de I+D según la cual el talento que tenemos dentro de la empresa esté motivado y alineado con nuestra prioridades; priorizamos nuestras inversiones y le sacamos el máximo partido a las oportunidades científicas que se nos presentan. Esta estrategia tiene cinco componentes principales:

  • Redefinir nuestros principios rectores de I+D

    • Centrarnos en fármacos innovadores para necesidades no satisfechas de pacientes con enfermedades graves
    • Perseguir objetivos validados en seres humanos
    • Mantener un extenso abanico de herramientas y modalidades de fármacos con una atención especial a los biosimilares
    • Potenciar la rentabilidad de la inversión y la eficacia operativa
    • Aprovechar la innovación externa
    • Demostrar el valor de nuestros fármacos

    Amgen aspira a convertirse en la mejor compañía terapéutica del mundo. Alcanzar ese objetivo pasa por construir una empresa líder mundial en I+D, tal y como establecen nuestros principios rectores, concebidos para reforzar nuestras prioridades estratégicas..

    Centrarnos en fármacos innovadores para necesidades médicas no cubiertas de pacientes con enfermedades graves. Si bien Amgen persigue constantemente nuevas oportunidades y se adapta a nuevos desafíos, mantenemos un compromiso inquebrantable con nuestra misión: mejorar y alargar la vida de los pacientes que sufren enfermedades graves.

    Perseguir objetivos validados en seres humanos. Creemos que estamos a las puertas de una revolución científica en la que la genética poblacional ayudará a revelar nuevos objetivos que suponen riesgos para la salud en los seres humanos. Al concentrarnos en objetivos amparados por la genética humana y otras pruebas humanas que aportan claridad, pretendemos aumentar nuestras tasas de éxito clínico, reducir los tiempos de desarrollo y rebajar el coste de proporcionar nuevos medicamentos a los pacientes.

    Mantener múltiples modalidades de fármacos haciendo hincapié en los biosimilares. Amgen aborda el descubrimiento de nuevos fármacos priorizando siempre la biología. Nos esforzamos por seleccionar objetivos farmacológicos basándonos en un conocimiento profundo de la biología de la enfermedad y, en función de ello, seleccionamos la modalidad de fármaco o plantilla estructural más idónea. Tenemos una experiencia sólida en el desarrollo y producción tanto de fármacos biológicos originales como de biosimilares. Asimismo, mantenemos un amplio abanico de modalidades farmacológicas, incluyendo moléculas pequeñas, para contar siempre con la herramienta que permita combatir mejor la diana terapéutica que tenemos entre manos.

    Potenciar la rentabilidad de la inversión y la eficacia operativa. Para maximizar el valor de la inversión en I+D, en Amgen canalizamos los recursos hacia programas que ofrecen parámetros de amplio espectro y una mayor probabilidad de éxito. Maximizamos el valor de los activos con una menor prioridad estableciendo colaboraciones y concediendo licencias para producir nuestros fármacos externamente. Amgen busca incansablemente la manera más eficiente de operar con el fin de reducir la cantidad de ciclos, acotar más los ensayos clínicos y garantizar un seguimiento centralizado de las sedes en las que se lleva a cabo el estudio.

    Aprovechar la innovación externa. En Amgen buscamos oportunidades de innovación allí donde aparecen. Por eso, en la actualidad, aproximadamente la mitad de nuestros proyectos en último estadio emanan de colaboraciones o adquisiciones de otras compañías. Valoramosla sinergia entre la innovación interna y externa: para identificar y añadir valor a las mejores invenciones externas, necesitamos tener, internamente, un gran talento científico y la capacidad de desarrollo y producción apropiada.

    Demostrar el valor de nuestros fármacos. Los pacientes no se beneficiarán de los fármacos a los que no puedan acceder y cada vez más ese acceso depende de satisfacer unos estándares en evolución continua establecidos por los legisladores y los pagadores. Con el fin de cumplir tales expectativas, nos esforzamos en proporcionar importantes avances terapéuticos: fármacos que ofrecen beneficios contrastados para los pacientes y que contribuyen a mantener la sostenibilidad del sistema sanitario.

  • Garantizar que las inversiones principales se basen en ciencia contrastada

    • Adoptar el planteamiento de «seleccionar a los mejores» para fomentar los programas con un alto potencial basados en objetivos terapéuticos validados en humanos.
    • Establecer colaboraciones o conceder licencias externas para producir activos de menor prioridad.
    • Continuar aprovechando la innovación externa para complementar los recursos y los programas internos.

    Muchas empresas del sector aplican una estrategia, conocida en inglés con la expresión «Shots on Goal» (o «tiros al blanco»), que consiste en tener el mayor número posible de moléculas en su pipeline para aumentar así las posibilidades de que al menos alguno tenga éxito. Ese enfoque tiene como objetivo ampliar el conocimiento de la biología humana (todavía hoy limitado) pero, en la práctica, suele conllevar unos costes más elevados en el desarrollo de fármacos y una baja productividad.

    En Amgen, por el contrario, nuestra estrategia es confiar en nuestros mejores científicos para que sean ellos quienes escojan a ‘los caballos ganadores’, identificando y acelerando las moléculas en desarrollo más prometedoras. Con este fin, priorizamos los programas basados en objetivos que han sido validados en humanos, principalmente mediante una investigación genética que demuestre una clara influencia de dicho objetivo en el riesgo de padecer una enfermedad. Por ejemplo, fueron los estudios genéticos los que desvelaron la vinculación entre los inhibidores PCSK9 y la homeostasis del colesterol, la importancia que la esclerostina desempeña en la regulación del crecimiento óseo. Nuestra filial, deCODE Genetics, aporta a Amgen una fuerza renovada en la genética poblacional y nos posiciona para liderar la revolución en el descubrimiento de objetivos con base genética que empieza a vislumbrarse en el horizonte.

    Si bien esta estrategia no garantiza el éxito de cada uno de los programas designados, confiamos en que aumentará la tasa de éxito general de nuestros ensayos clínicos, acelerará los plazos de desarrollo de los fármacos, reducirá los costes y mejorará la rentabilidad de las inversiones en I+D.

    Cuando nos encontramos con más programas de los que podemos ofrecer a los pacientes con nuestros propios recursos, buscamos nuevas colaboraciones u ofrecemos licencias externas a empresas que puedan producir estos excedentes de activos. Los acuerdos resultantes proporcionan ingresos que pueden destinarse a financiar programas clave de nuestro pipeline, que a su vez satisfacen los intereses de los pacientes al garantizar el desarrollo potencial de más fármacos.

    También buscamos de manera activa innovaciones externas que complementen nuestro talento y programas internos. Esta voluntad de sacar partido de la innovación donde quiera que se encuentre se ejemplifica mediante nuestras adquisiciones de deCODE Genetics, Micromet, KAI Pharmaceuticals y Onyx Pharmaceuticals en los últimos años.

  • Reenfocar y diferenciar nuestros proyectos de ‘Investigación para el Descubrimiento’

    • Centrarnos en parámetros de amplio espectro dentro de las enfermedades graves.
    • Capitalizar nuestros puntos fuertes en genética humana, biología innovadora e ingeniería de proteínas.
    • Aprovechar las tecnologías de nuevas plataformas para elaborar pipeline sólido en inmuno-oncología.

    En un momento de la historia en el que los avances tecnológicos están revolucionando cómo se descubren los fármacos, la estrategia de Amgen busca aprovechar al máximo cualquier oportunidad que se presente. Hemos hecho grandes inversiones en descubrimientos con base genética y nuevas plataformas terapéuticas, y nos hemos centrado en enfermedades en las que nuestro conocimiento científico tiene el potencial necesario para realizar avances importantes.

    En los últimos años, la secuenciación ultrarrápida del ADN ha acelerado la investigación de variantes genéticas fuertemente vinculadas al riesgo de padecer enfermedades. Gracias a la adquisición de deCODE Genetics, Amgen está avanzando en una cartera de proyectos basados en genes recién descubiertos que aún se encuentran en un estadio inicial y cuyo potencial vemos ya que es asombroso. Esta estrategia se basa en nuestro historial de transformar el conocimiento genético en nuevos fármacos. Siete terapias de Amgen, cuyo uso se ha aprobado en pacientes, tienen su origen en genes que se clonaron por primera vez en nuestros propios laboratorios.

    Para perseguir con éxito nuevas dianas terapéuticas de la genética, nos beneficiamos de los principales puntos fuertes de Amgen: la biología y la ingeniería de proteínas. Genes de predisposición a enfermedades recién descubiertos pueden servir para codificar proteínas con funciones desconocidas, proteínas que pueden resultar muy difíciles de combatir con los fármacos tradicionales. Para luchar contra dianas terapéuticas que suponen un desafío, es preciso desenmarañar y entender la compleja biología antes de seleccionar la mejor modalidad de fármaco de entre nuestras herramientas o de diseñar una nueva modalidad mediante ingeniería.

    Para mejorar aún más nuestros tratamientos oncológicos que funcionan activando las defensas inmunológicas del organismo, hemos fusionado en una única entidad nuestros grupos de Investigación para el Descubrimiento encargados de la oncología y la inflamación. Esa consolidación busca aprovechar plenamente las plataformas inmuno-oncológicas de Amgen, incluyendo nuestras novedosas estructuras de anticuerpos BiTE® (conectores de células T biespecíficos), así como nuestra inmunoterapia oncolítica.

    En todos nuestros programas de ‘Investigación para el Descubrimiento’ hemos subido el listón de cómo queremos que las terapias de Amgen se diferencien del resto. Nuestro objetivo es proporcionar tratamientos nuevos que ofrezcan claros beneficios y amplios efectos, tales como una supervivencia prolongada al cáncer, la prevención de migrañas o la prevención de ataques asmáticos graves.

  • Aplicar un planteamiento que priorice la biología para seleccionar herramientas y objetivos correctos

    • Centrarnos en la biología de selección de dianas terapéuticas en primer lugar y dejar en segundo lugar las consideraciones relativas a la modalidad.
    • Consolidar moléculas pequeñas, medianas y grandes en una única plataforma integrada.
    • Centrarnos en la biología a la vez que garantizamos el desarrollo de moléculas pequeñas cuyo comportamiento esté al más alto nivel.

    En Amgen creemos que el descubrimiento de nuevos fármacos pasa por una profunda comprensión de la biología. Esta comprensión guía la elección crítica de qué diana de la enfermedad atacar, al tiempo que nos permite seleccionar la herramienta indicada para tal objetivo: la modalidad o plantilla estructural con más probabilidades de optimizar la eficacia y la seguridad.

    Amgen posee uno de los conjuntos de herramientas para distintas modalidades más extensos del sector. Engloba moléculas pequeñas, que pueden crearse mediante química; moléculas de tamaño intermedio como los péptidos; y moléculas biológicas grandes, como los anticuerpos u otros tipos de proteínas terapéuticas. La cartera de productos de Amgen y sus proyectos en curso también incluyen multitud de modalidades novedosas, como los pepticuerpos, los anticuerpos específicos BiTE® y otras moléculas biespecíficas, anticuerpos conjugados y fármacos e inmunoterapia oncolítica.

    Además, Amgen ha integrado esta amplia plataforma de modalidades en una única entidad destinada al descubrimiento de fármacos. Hemos derribado los muros que normalmente separan a los científicos de moléculas pequeñas, medianas y grandes para fomentar el trabajo en equipo y propiciar una colaboración transversal entre diversos conjuntos de habilidades y conocimiento. Nuestro objetivo es garantizar un enfoque que priorice la biología a la hora de realizar descubrimientos mediante la eliminación de grupos independientes que observan la enfermedad a través del prisma de una única modalidad de fármaco.

    Cuando existen varias opciones entre diferentes modalidades de fármacos, valoramos la amplia experiencia de Amgen en el desarrollo y la producción de biológicos. Aunque los fármacos de moléculas grandes suelen tener tasas de éxito más elevadas en el desarrollo clínico, calculamos que en torno a dos terceras partes de los dianas terapéuticas no pueden abarcarse con biológicos. Por eso, la compañía también tiene una gran experiencia en el descubrimiento y desarrollo de moléculas pequeñas.

  • Reforzar la rentabilidad de la inversión mediante la eficacia operativa

    • Construir una cultura de mejora continua centrada en unas mayores tasas de éxito, plazos de inversión más rápidos y reducción de costes.
    • Lograr reducir de manera significativa los costes de los ensayos clínicos antes de 2018 a la vez que conseguimos ciclos más cortos y con mayor calidad.

    Además de garantizar que las decisiones sobre las inversiones que hace Amgen se basan en un conocimiento científico contrastado, estamos rediseñando nuestros procesos para operar de manera más eficiente. Este proyecto en curso tiene como fin mejorar nuestras tasas de éxito y reducir la cantidad de ciclos a la vez que reducimos costes, lo cual nos permitirá proporcionar más fármacos nuevos surgidos de nuestras inversiones en I+D.

    Para lograr ese objetivo, Amgen está construyendo una cultura de mejora continuada, respaldada por un amplio abanico de actuaciones concebidas para aumentar nuestra productividad en todos los ámbitos. Por ejemplo:

    • Hemos recortado nuestro pipeline para eliminar aquellos programas de investigación con menos probabilidades de ofrecer a los pacientes beneficios significativos frente a otros tratamientos disponibles.
    • Con vistas a reducir el coste y la complejidad de nuestra red de laboratorios de investigación, hemos reunido a más científicos en los centros de investigación de Cambridge (Massachusetts) y South San Francisco (California) en Estados Unidos.
    • Estamos reduciendo casi en un año el tiempo necesario para que las terapias basadas en anticuerpos monoclonales lleguen a la clínica gracias a una estrategia de servicio rápido al paciente.

    Amgen también está diseñando programas de ensayos clínicos más acotados gracias a protocolos racionalizados; monitorización centralizada de los emplazamientos clínicos; control de calidad basado en riesgos; y una esmerada gestión del suministro de fármacos. Para 2018, esperamos que estos esfuerzos y otras mejoras en los procedimientos reduzcan el coste de nuestros ensayos clínicos de manera significativa, acortando al mismo tiempo la duración de los programas clínicos de Amgen en seis meses de media.